El hotel tiene un ambiente acogedor y una

ubicación impresionante junto al río Pisuerga. Las habitaciones son cómodas y bien decoradas, perfectas para desconectar. Sin embargo, el menú del desayuno podría mejorar para ofrecer más variedad. Un aspecto encantador fue la atención cálida del personal, que nos hizo sentir como en casa.

El jardín donde tomábamos algo era increíble.

El entorno natural es impresionante, con el sonido relajante del río Pisuerga que acompaña cada mañana.

El desayuno podría mejorar en calidad, ya que los productos parecían de días anteriores.

El entorno es ideal para desconectar y hacer senderismo.

Me decepcionó que no haya ascensor, lo que dificultó el acceso a nuestra habitación en el último piso, especialmente con maletas. La habitación era bastante básica y, aunque el clima hizo calor, la falta de aire acondicionado resultó incómoda. Además, como no podíamos abrir la ventana del baño, el ambiente se sentía claustrofóbico durante la noche.

Entorno tranquilo, sonido del río, ubicación central en la naturaleza,

Falta de actividades diversas, opciones limitadas de comedor, el ruido del río se escucha bien, pero una pequeña mejora en la limpieza sería genial!!!

Naturaleza y tranquilidad en Salinas

El sonido del río al fondo y un entorno natural impresionante hicieron que cada mañana fuera especial. Las camas eran muy cómodas, lo que ayudó a descansar después de días explorando.

Sin embargo, el mantenimiento del lugar deja que desear. Las instalaciones estaban un poco descuidadas, y además, la falta de aire acondicionado hizo que algunas noches fueran incómodas.

El entorno del hotel es simplemente encantador. Disfrutamos de un desayuno variado y la atención de Xavier fue excepcional, siempre dispuesto a resolver cualquier duda. Además, el sonido del río Pisuerga fue muy relajante.

Pasamos un fin de semana increíble con amigos. La ubicación es genial, justo al lado del Cuérnago de los Sotos, perfecto para excursiones y actividades al aire libre. Además, hay muchas rutas y actividades para explorar los atractivos romanos de la zona. Recomendamos la comida del lugar, deliciosa y bien preparada.

Una de las habitaciones no cumplía lo reservado, ya que nos dieron una cama doble y una individual pequeña en lugar de tres camas individuales. Las almohadas eran un poco finas, lo que afectó el confort durante la noche.

tranquilidad absoluta junto al río

camas cómodas, desayuno variado

habitación simple

Pasamos dos noches en El Molino y la experiencia fue muy agradable. La ubicación es espectacular, con vistas al río Pisuerga y rodeado de un entorno natural hermoso. Las habitaciones son amplias y muy limpias, lo que hizo nuestra estancia más cómoda. El desayuno buffet era variado y completo, con atención constante para que no faltara nada. Sin embargo, tuvimos un inconveniente con una de las habitaciones. Inicialmente reservamos una con tres camas individuales, pero nos dieron una cama doble y una individual de tamaño pequeño, lo que no cumplió con lo que habíamos acordado. Además, notamos que algunas almohadas eran un poco finas, lo que afectó un poco nuestro descanso. A pesar de esto, el entorno es muy tranquilo y perfecto para desconectar y explorar la montaña palentina. Definitivamente recomendaría el lugar para aquellos que buscan paz y belleza natural.

El entorno de este hotel es encantador, con vistas al río Pisuerga que proporcionan tranquilidad. Las habitaciones son acogedoras y bien decoradas, ideales para desconectar. Sin embargo, la gestión del restaurante podría mejorar, y el desayuno presentado fue bastante regular. A pesar de esto, es un lugar perfecto para quienes buscan paz y belleza natural. Es recomendable para estancias cortas.

Hotel El Molino De Salinas es un lugar precioso, con un entorno natural increíble. Las habitaciones son cómodas y tienen todo lo necesario. La atención del personal es excepcional, siempre listo para ayudar. Lo mejor fue la cena de degustación que probamos en el restaurante cercano, una experiencia inolvidable.

No hay ascensor y las habitaciones pueden sentir algo calurosas.

el hotel es precioso, aguas tranquilas del río pisuerga dán un relax total. las habitaciones son cómodas y están bien decoradas, y el desayuno está super bien, variado y rico. además, la atención del staff es muy cercana y amable, te hacen sentir como en casa. el entorno es ideal para desconectar y hacer senderismo, hay rutas cerquísima.

pero la gestión en el restaurante deja un poco que desear y se debería mejorar la limpieza en algunas zonas. y estaría bien un poco más de mantenimiento en las instalaciones.

Impecablemente limpio y servicio excepcionalmente atento, proporcionando un entorno acogedor y lleno de encanto natural.